Quedan 24 días... para mí, hoy no cuenta!

Hoy amanecí puteada, estoy harta de tanta mentira...
A veces mi pasión, la política, apesta!
Y lo peor, el pueblo sigue siendo TAAAAN inocente, que se la traga enterita...
¿Qué será lo que hace falta para hacernos despertar?
Hoy en la mañana, mientras compraba pan, cigarros y jugo de naranja para el desayuno, un tipo en la pulpería del barrio se puso a hablar de sus razones para estar a favor del TLC...
No pude evitarlo, le discutí un poco y tratando de no enojarme, después de todo es un trabajador engañado, posiblemente los patronos los amenazaron con perder el brete o algo peor.
Después de un rato de discutir sobre derechos laborales, monopolios estatales y modelos solidarios, me di cuenta que no ibamos a llegar a ningún lado, por más verdades estadísticas que le dijera... el tipo cree en Arias... eso es lo peor...
¿Cómo puede ser que un puto premio Nobel haga que un pueblo entero (o una gran parte de él) olvide que comieron mierda (eso, si es que comieron algo) durante su gobierno anterior?
¿Ni siquiera el descarado memorandum de Kevin Casas y Francisco Sánchez, o el gran Ingenio Taboga siembran sospechas acerca de las buenas intenciones del gobierno?
¿Cómo aún no identifican que los tratos entre ricos, son eso, PARA RICOS?

¡Estoy enojada!

Hoy no me importan los versos, ni Francisco (inexistente personaje principal de este blog)...
Hoy sólo quiero salir a la calle y de pronto encontrar esperanza para seguir trabajando en lo mío, que por ahora es la campaña contra el TLC...
Para tener más fuerza mañana...
Después de todo, aún nos quedan tres semanas de vida...